Joshiah

7 de Diciembre de 2003 QA

Bien, ahora, una vez más, permítannos expresar nuestra gratitud por invitarnos nuevamente a su nivel vibracional, por compartir su realidad con cada uno de ustedes una vez más.

Antes de comenzar, les recordamos que existe la oportunidad de que participen en esa comunicación silenciosa, ese intercambio telepático de información con otras entidades que están con nosotros esta tarde; solo tienen que expresar la intención, y la oportunidad será suya. Y como antes, verán que, si eligen alterar su conciencia, descubrirán que, al cerrar los ojos y expresar la intención, la energía que existe dentro de este espacio sagrado los asistirá en lograr esa alteración de su conciencia hacia ese llamado estado meditativo.

Ahora bien. Les hablamos esta tarde sobre los estados alterados de conciencia, específicamente sobre el estado alterado de conciencia que ustedes llaman morir —entrar en ese estado entre encarnaciones—, pues en verdad ustedes nunca pueden morir.

Ahora. Cuando existen dentro de este período de encarnación y eligen dejarlo, alteran su conciencia un paso más allá de lo que llamamos un estado profundo de sueño. Alteran esa conciencia hacia el estado intermedio entre encarnaciones. No solo es esa una alteración más profunda de la conciencia respecto al estado de sueño, sino que también ustedes, como individuos, en ese punto eligen no regresar a este período encarnacional particular en ese cuerpo físico o atributo específico. Esto no significa necesariamente que no regresen a un período de tiempo similar. Porque, como ven, el tiempo es una ilusión, y es posible para ustedes experimentar encarnaciones simultáneamente dentro de un período encarnacional específico.

Ahora bien. Debido a su creencia en el marco temporal ilusorio, les resulta un concepto difícil de comprender que es posible existir en un período encarnacional en un cuerpo físico particular o con ciertos atributos físicos, y luego elegir reencarnar en el mismo período de tiempo y tener una experiencia completamente diferente, basada en los acuerdos de conciencia humana y en la creación de esa era particular de su tiempo. Sin embargo, es posible. Una vez que dejan ese período encarnacional y entran en los estados entre encarnaciones, no eligen reencarnar en el mismo cuerpo físico. No eligen regresar, por ejemplo, un día después.

Ahora bien. No es que no pudieran hacerlo. En absoluto. Pero, como ven, hacerlo destruiría la ilusión del tiempo, destruiría la ilusión de que ustedes terminan un período encarnacional particular o una vida en particular. Es como si atravesaran una puerta al entrar en ese estado entre encarnaciones y cerraran la puerta con llave detrás de ustedes para no poder regresar. Esto no significa que no puedan volver a ese período encarnacional en particular, pero no regresan con los mismos atributos físicos, con el mismo cuerpo físico. Y hacen eso para perpetuar la ilusión.

Ahora bien. Muchos individuos que permanecen en el llamado estado consciente dentro de un período encarnacional determinado, lamentan la pérdida de un individuo que ha elegido terminar ese período encarnacional. Si los individuos exploraran sus sistemas de creencias, si fueran absolutamente honestos con sus sentimientos y emociones, descubrirían que la mayor parte de ese llamado duelo no se debe a que la otra persona haya pasado a un nivel vibracional diferente, si lo desean llamar así, o a un estado de conciencia distinto, sino más bien a un sentimiento de pérdida por no tener la oportunidad de interactuar con ese otro individuo, por extrañar las actividades e interacciones cotidianas que compartían con él mientras estaban en el estado consciente.

Gran parte del duelo de un individuo mientras está en el estado consciente no se debe a que sienta que el otro está en una posición mucho peor, ni a que crea que el otro sufre más que cuando estaba en este período encarnacional, sino que se trata más bien de un sentimiento de pérdida. Es más una sensación de insatisfacción personal por no haber expresado amor, por no haber cumplido los deseos de interactuar con el otro individuo. “Oh, si tan solo hubiera…”

Mientras están en este período encarnacional, ustedes, como individuos, entran en estados meditativos si así lo eligen, y pueden alterar su conciencia —y de hecho la alteran— para entrar en estados de sueño. Les hemos sugerido que, cuando se hallan en esos estados alterados de conciencia, si así lo desean, es posible que interactúen con otras entidades que existen en otros niveles de conciencia, ya sean esos otros niveles de conciencia que ocurren dentro de este mismo período encarnacional, o niveles de conciencia que se encuentran entre los períodos de encarnación, o incluso niveles de conciencia que se experimentan en otros niveles vibracionales y en otras áreas de conciencia que corresponden a otros períodos encarnacionales dentro de este mismo nivel vibracional. Cuando están en su estado de sueño, es posible para ustedes —no solo posible, sino que efectivamente sucede— tener esas interacciones. Ustedes establecen acuerdos y se relacionan con aquellos otros individuos que podrían llamar “del otro lado”.

Ahora bien. También es posible, dependiendo de sus sistemas de creencias, que los individuos alteren su conciencia, entren en un estado meditativo e interactúen con otros individuos que se hallan en ese llamado estado intermedio entre encarnaciones, otros individuos que han alterado su conciencia hasta el punto de no regresar a este período encarnacional particular en un cuerpo físico determinado. Como ven, ustedes, como individuos, están experimentando períodos encarnacionales multidimensionales de manera simultánea. Y en esos otros períodos encarnacionales que están ocurriendo en el ahora, están interactuando con ese mismo individuo que sienten que han perdido en este período encarnacional. Tal vez no sea en el mismo tipo de relación, tal vez ni siquiera esté remotamente conectado con una relación similar a la que experimentaron en esta encarnación, pero aun así es la misma entidad. Y de hecho está participando en actividades, relaciones e interacciones con ustedes, acordadas en esa parte subconsciente de su conciencia. Todo ello se basa en sus creencias, elecciones y decisiones, con las cuales ustedes, como individuos, crean las realidades, crean las ilusiones, y otros individuos eligen participar en esas interacciones.

Y ustedes, como individuos, tienden a perpetuar esas interacciones con otros, aunque muchas veces las relaciones cambien. No solo las relaciones, sino incluso los géneros de los individuos involucrados en esas interacciones y relaciones. Lo que en una interacción, dentro de un período encarnacional, puede ser una relación distante —pero aun así una relación que se perpetúa a lo largo de todo el nivel vibracional y durante todo el período encarnacional—, podría ser con un individuo con quien, en otro período encarnacional, estuvieron involucrados en una relación muy cercana, quizás familiar. Incluso podrían intercambiar roles dentro de una situación familiar a lo largo de varios períodos encarnacionales, así como también intercambiar géneros.

Y sin embargo, dentro de cada período encarnacional, cuando un individuo elige dejar ese período, otros que permanecen lloran por él, aunque continúan interactuando con ese individuo en su estado de sueño. Y si lo desean, pueden desarrollar la capacidad de interactuar con ese individuo en un estado meditativo. Con el duelo, perpetúan la ilusión. Con el duelo, otorgan legitimidad al principio y al final. Con el duelo, perpetúan la creencia de que existe el tiempo, de que algo comienza y algo termina. Y muchos preguntarán: “¿Por qué tuvo que terminar?” Bueno, no tuvo que terminar en absoluto. Fue una elección. Fue una elección, y nunca terminó realmente. Fue una alteración de la conciencia. Ustedes existen en una ilusión. Existen en una ilusión. Esa es la clave para comprender: que existen en una ilusión.

Cuando están en ese estado alterado de conciencia y en ese estado meditativo, muchos individuos recibirán impresiones de interacciones con otros que quizá existen en este mismo período encarnacional o que tal vez ya han partido, si así quieren llamarlo, o incluso con otros individuos que existen en otros niveles vibracionales de los cuales no tienen absolutamente ningún recuerdo en su estado consciente dentro de este período encarnacional. Y cuando eso comienza a ocurrir, muchos individuos tienden a sugerir que está en su imaginación. Cuando están en ese estado meditativo y comienzan a experimentar y expresar el deseo de tener experiencias de regresión a vidas pasadas, muchos también tienden a descartarlo como simple imaginación. Es simplemente un recuerdo, y aunque puedan tener una vívida sensación de emociones y sentimientos relacionados con esa situación particular, aún tienden a cuestionarse: “Quizás es solo mi imaginación.” Bueno, una noticia impactante para ustedes: todo su pasado es una imaginación.

Como ven, existen dentro de una imaginación. Existen dentro de una ilusión. Lo que recuerdan de su llamado pasado, lo recuerdan basándose en sentimientos y emociones. Esos son los detonantes que traen a su memoria el recuerdo de eventos pasados, ya sean eventos que puedan verificar dentro de este período encarnacional particular o eventos que ocurrieron en otros períodos encarnacionales. El método de recuerdo es exactamente el mismo. Los sentimientos y las emociones son legítimos, y los recuerdos son legítimos.

Ahora bien. Puede haber ligeras alteraciones en un recuerdo al comparar las descripciones de dos individuos que les relaten períodos encarnacionales que ocurrieron, por ejemplo, hace varios siglos. Y entonces aparecerán los escépticos que dirán: “Bueno, no son exactamente iguales. Mira, tal persona vio esto y este otro individuo dice que experimentó aquello, y sin embargo ocurrieron al mismo tiempo. Entonces, ¿quién tiene razón y quién está equivocado?” Pues bien, lo que ustedes perciben se basa en sus sistemas de creencias. Lo que experimentan como emociones y sentimientos es un reflejo de sus sistemas de creencias, de sus actitudes.

Dos individuos que existan dentro de un período encarnacional que puede verificarse les darán relatos contradictorios del mismo acontecimiento. Dos individuos pueden experimentar una misma interacción y, cuando se les pregunte por separado, tendrán una perspectiva diferente de lo que ocurrió. ¿Eso lo hace menos real? En absoluto. ¿Significa eso que uno está usando su imaginación y el otro está dando un relato preciso? En absoluto. Ambos les están dando relatos precisos basados en su percepción particular, la cual es un reflejo de sus sistemas de creencias, sus actitudes y sus elecciones.

Lo que recuerdas cuando estás involucrado en interacciones meditativas se basa en tus creencias, en tus actitudes particulares, en tus elecciones, en tu imaginación. Absolutamente. ¿Es real? Todo tu nivel vibracional es una ilusión. No es real. ¿Es legítimo? Absolutamente.

Cuando ustedes, como individuos, están involucrados en esa interacción meditativa o en ese estado profundo de sueño con otros individuos que supuestamente han alterado su conciencia de modo que no existen en este nivel vibracional particular o en este período encarnacional particular, la interacción es legítima. No es solo la imaginación de uno. Y muchas veces la interacción se verifica —para aquellos que necesitan la verificación— creando, una vez más, las ilusiones dentro de su estado consciente que ayudan a confirmar aquello en lo que creen.

Todo tu nivel vibracional es una ilusión. Toda tu realidad en tu estado consciente es la realidad más ilusoria que experimentarás, y puedes crear lo que desees para perpetuar la ilusión y verificar tus sistemas de creencias. Otros individuos que han llamado “muertos” simplemente están en un estado alterado de conciencia que es un paso más allá de tus estados profundos de sueño. Y si deseas interactuar con ellos, absolutamente puedes hacerlo. Solo tienes que creer.

Cuando lloras por esos individuos, no es porque temas que estén en una peor situación, sino porque temes no volver a verlos, y es un sentimiento de pérdida. Es una de las emociones o sensaciones más difíciles de superar, y esa es el miedo a perder. Es uno de los miedos, si lo deseas, una de las emociones que más te hacen sentir amenazado y sobre la que sientes tener menos control. Y, sin embargo, no puedes perder nada. No puedes perder nada. Es una ilusión. Y cuando estás en tu estado consciente estás tan alejado de quién y qué eres realmente como te es posible estarlo. Y cuando estás en tus estados alterados de conciencia puedes interactuar con cualquier individuo que desees. Solo tienes que creer. Y no hay pérdida de ese individuo. Puedes y de hecho interactúas con ellos. Y en muchos casos estás involucrado en muchos otros períodos encarnacionales participando activamente en interacciones con esos individuos.

La dificultad es que el uso del vocabulario tiende a hacer que uno intente percibir las ideas literalmente. Y se vuelve muy limitado creer que, “si todo es una ilusión, entonces debo crear también a todos los demás, y ellos también deben ser ilusiones.” Y hemos sugerido antes que no es así. Cada individuo que existe dentro de tu nivel vibracional es una chispa de conciencia, una chispa de conciencia que tiene la capacidad de crear su realidad, y la crea a través del amor. Es igual, ni más ni menos, que cualquier otra chispa de conciencia que existe en todos los demás niveles vibracionales a lo largo de toda la creación.

De manera similar, nosotros somos una chispa de conciencia, igual, ni menor ni mayor, que cualquier otra chispa de conciencia que existe en toda la creación, incluyendo las conciencias que han elegido existir dentro de tu nivel vibracional. Somos, como tú, una parte del Uno. Somos esa chispa de conciencia, si lo deseas. Y realmente no importa qué terminología intentemos darte como descripción, es limitada.

Los individuos que entran en estados meditativos y desarrollan la capacidad de traer de regreso a su conciencia la memoria de la interacción de ese estado meditativo pueden desarrollar la capacidad de entrar en un estado alterado de conciencia muy similar a lo que llamamos un estado profundo de sueño consciente, donde perpetúas tu realidad, donde estableces los contratos y los acuerdos.

Ahora bien, aquellos individuos que desarrollan esa capacidad mental para alterar su conciencia, entrar en ese estado profundo de meditación y traer de regreso a su conciencia una memoria relativamente precisa de lo que experimentaron, te dirían que muchas veces traen consigo una experiencia de interacción con esa parte que podrías llamar tu ser superior, y su capacidad de describirla está limitada por el uso del vocabulario. No pueden explicártelo. No pueden darte una descripción precisa. Y ocurre algo muy, muy emocionante para ellos en su estado consciente: alcanzan una comprensión de quiénes y qué son realmente, y comprenden la ilusión en la que existen. Y muchas veces, toda su perspectiva sobre tu creación, sobre tu nivel vibracional, se transforma por el resto de ese período encarnacional particular. Cada uno de ustedes tiene dentro de sí esa capacidad. Cada uno de ustedes posee dentro de sí todo el conocimiento que desea. Solo tienen que expresar la intención. Solo tienen que creer que pueden alcanzarlo. Y pueden hacerlo. Es su elección no tener esa comprensión de manera consciente. Es su elección estar limitados en su capacidad de traer a su conciencia la comprensión de quiénes y qué son realmente.

Cuando les sugerimos que son una Parte del Uno, da la impresión de que debe haber un gran Uno y que nosotros somos una pequeña parte. Y eso no es en absoluto lo que estamos sugiriendo. Esa es una limitación que surge del uso del vocabulario. Es un concepto difícil de describir. Cuando les decimos que son una chispa de conciencia, da la impresión de: “Bueno, somos solo una pequeña chispa.” Pero esa pequeña chispa se basa en la creencia de que existe el espacio. Ustedes son tan grandes como puede existir. La energía que ustedes son, cada uno de ustedes —no solo dentro de nuestro pequeño grupo particular— sino cada uno de los que existen en su nivel vibracional, la energía que ustedes son existe dentro de cada átomo de todo su universo. Eso les da una idea de cuán pequeños pueden ser y, al mismo tiempo, ilimitados en tamaño. Ustedes existen en cada átomo de todo su universo.

Y así, no somos simplemente su creación, del mismo modo que ustedes no son nuestra creación. Somos una Parte del Uno, como ustedes son una Parte del Uno. En última instancia, todos estamos conectados. En última instancia, todos somos individuos. Así como ustedes pueden ser tan pequeños como puedan imaginar y, aun así, absolutamente infinitos en tamaño, del mismo modo estamos conectados y, sin embargo, somos individuos. No somos su creación más de lo que ustedes son la nuestra. Ustedes no son más la creación de su vecino de lo que su vecino es su creación. Ustedes crean su realidad, absolutamente, basada en sus sistemas de creencias. Crean su realidad dentro de un acuerdo consensuado —que está más allá de su comprensión en su estado consciente— para participar en la existencia y las actividades cotidianas que corresponden con los deseos, creencias y elecciones de otros individuos. Ustedes son, una vez más, una personalidad multidimensional. Mucho más de lo que puedan imaginar.

Nosotros también somos una personalidad multidimensional similar, en cierto sentido la misma Parte del Uno, y sin embargo, en otro sentido, absolutamente separados. Ustedes no son nuestra creación. Absolutamente no. Ni siquiera intentaríamos sugerirles que tengamos algún deseo o alguna capacidad de crearlos a ustedes o de crear su realidad por ustedes. Y, a la inversa, nosotros no somos su creación y ustedes no tienen la capacidad de crear por nosotros. No tienen la capacidad de influir en nuestra creación más de lo que nosotros deseamos permitir que tengan esa influencia.

Siendo tan difícil de comprender en tu estado consciente que cada individuo involucrado en todo tu nivel vibracional interactúa con los demás, ese se convierte en un concepto difícil de asimilar para muchos: que cada individuo ha elegido participar en este período encarnacional particular, y que puede haber individuos existiendo al otro lado de tu sistema terrestre que, en sus estados de sueño, están interactuando con individuos que existen en este lado de tu Tierra. Pero ves, el espacio es una ilusión. Toda tu existencia es una ilusión, y cuando mantienes el concepto de que existe el espacio, se vuelve difícil entender cómo algún individuo que existe al otro lado del sistema terrestre puede estar experimentando e interactuando con individuos de este lado de tu Tierra, y sin embargo, eso ocurre todo el tiempo.

En los estados de sueño no hay espacio ni hay tiempo. Cuando entras en ese estado alterado de conciencia no existe absolutamente ninguna ilusión de tiempo ni de espacio, y todo desaparece. Puedes encontrar ejemplos de lo que muchos llaman sucesos extraños o coincidentes a lo largo de toda tu historia, donde hay un individuo que existe en un continente determinado y está descubriendo algún gran avance científico, y simultáneamente hay otro individuo al otro lado de tu Tierra haciendo exactamente lo mismo.

Como una conciencia humana, como una conciencia humana total, han acordado incorporar esos conceptos en su realidad, hacerlos reales basándose en las creencias que mantienen, perpetuar la ilusión, hacer que la imaginación —la misma realidad en la que existen— tome un rumbo completamente diferente. E incluso elaboran las pruebas científicas que lo validan, para poder experimentarlo conscientemente y así darle credibilidad a todo el escenario. Y al otro lado de su Tierra, una vez más, existe un grupo completamente diferente de individuos haciendo exactamente lo mismo. Y eso realmente refuerza que es científicamente comprobable y tan real que no solo lo tenemos aquí, sino también al otro lado del planeta. Y pueden encontrar ejemplos de eso ocurriendo a lo largo de toda su historia.

Por lo tanto, no debería sorprender que haya individuos que estén experimentando esta información particular que les estamos expresando en todo su sistema terrestre. En primer lugar, comprendan que solo les damos aquello que desean escuchar. Porque, verán, lo que les expresamos es lo que ustedes ya saben. Creer que existimos fuera de su nivel vibracional y que de alguna manera tenemos más conocimiento o una comprensión mayor de lo que están creando es bastante absurdo. Simplemente no ocurre. Ustedes tienen el conocimiento de la creación de su realidad, de su nivel vibracional. Cada individuo que existe dentro de todo su nivel vibracional tiene acceso a ese conocimiento. No hay excepciones.

Ahora bien, que existan otros individuos que hayan elegido participar en este período encarnacional particular y ocupar posiciones de lo que podrías llamar poder, no debería ser difícil de comprender. Esos individuos están allí debido a las creencias que ellos mismos sostienen y a las creencias que otros sostienen y que interactúan con las suyas, creando así la realidad que apoya esos sistemas de creencias. El hecho de que esos individuos estén en una posición de poder no significa necesariamente que no estén buscando una comprensión de quiénes y qué son realmente. Y cuando están en esa búsqueda de comprensión, es probable que reciban información desde su interior que les brinde las respuestas.

Ahora bien, esa información puede llegar a través de una canalización como la que estamos realizando o experimentando en este momento, si ese es el modo en que deseas recibirla. También puedes recibirla en un estado meditativo o en un estado de sueño. No necesitas escuchar una canalización. Puedes sentarte, alterar tu conciencia, expresar la intención y recibir el mismo mensaje. Absolutamente. Pero, ves, cuando lo escuchas a través de un canal, entonces se vuelve más real.

Aquí estamos, un individuo que existe —te decimos que ni siquiera existimos en tu nivel vibracional, existimos en otros niveles vibracionales—. Solo te damos aquello que deseas escuchar. Solo te decimos lo que ya sostienes dentro de ti mismo, y sin embargo, por alguna razón, tienes la tendencia a darnos más validez de la que darías a tus propios mensajes intuitivos. No tiene mucho sentido, cuando lo experimentes en tu estado alterado de conciencia. Pero mientras estás en tu estado consciente, el hecho de que sea información canalizada significa que es real. “Oh sí, eso es mejor. Alguien más nos lo está diciendo. No tenemos que descubrirlo por nosotros mismos.” Bueno, te hemos sugerido muchas, muchas veces que las respuestas existen dentro de cada uno de ustedes. Los métodos y técnicas que desean, que eligen, que deciden usar para traer esas respuestas a su conciencia son métodos y técnicas en los que creen. Y si creen en ellos, funcionarán. Absolutamente. Garantizado. Y otros individuos, ya sea en lo que podrías llamar posiciones políticas de poder o posiciones con influencia sobre otros individuos, reciben la información exactamente de la misma manera, tienen exactamente los mismos deseos de traer a su conciencia la comprensión de esta realidad que están experimentando, de modo que, muchas veces, eso pueda ayudarlos a crear lo que deseen, o, en muchos casos, a tener una mayor influencia sobre otros individuos sobre los que desean ejercer control, y los otros individuos participan en esa misma creación de realidad al tener el deseo de ser controlados.

Muchas veces, cuando estás en tu llamado nivel consciente y percibes interacciones con otros, y no crees haber tenido una interacción con ellos en el nivel consciente, te pedimos que comprendas, una vez más, que en tu nivel subconsciente, en ese nivel del proceso de creación de tu conciencia, interactúas con absolutamente todos los individuos que existen en todo tu nivel vibracional.

Eres mucho más de lo que puedes concebir. Tú, en tus estados alterados de conciencia, en tus llamados estados profundos de sueño, tienes la capacidad —y de hecho lo haces— de interactuar con todos los individuos que existen dentro de todo tu nivel vibracional. Sin excepciones. No hay extraños, si lo deseas. Y así, muchas veces traes a tu conciencia la percepción de haber interactuado con algún individuo y piensas: “Bueno, nunca he conocido a esa persona.” Bueno, quizás no hayas conocido a ese individuo que recuerdas en tu estado consciente, pero te aseguramos que en tu estado subconsciente, en algún momento, absolutamente has interactuado con esa persona. La interacción puede haber sido —y nuevamente usamos frases y terminología que intentamos expresar dentro del uso limitado del vocabulario— una reunión algo coincidente, si lo deseas, un ligero conocimiento, si lo deseas. Pero, no obstante, una interacción, un reconocimiento, una comprensión.

Muchas veces, los individuos —y cada uno de ustedes puede recordar experiencias similares— caminan por la calle, pasan junto a lo que parece ser un completo desconocido, y miran a ese individuo y, solo por un instante, por un destello, perciben todo tipo de emociones. Y es como: “Conozco a esa persona. La conozco.” Y, sin embargo, desaparece tan rápido como llegó. Y cuando miras a esa persona te preguntas: “¿De dónde vino eso?” Viene de que, en algún nivel, realmente conoces a ese individuo, y solo por un instante el velo no fue tan espeso como suele ser, y tuviste una percepción de quién era esa persona. Algunas de esas experiencias podrías llamarlas déjà vu, y sin embargo sabes muy bien que, en tu estado consciente, nunca has conocido a ese individuo.

Puedes estar en un país completamente diferente, donde no haya habido absolutamente ninguna posibilidad de una interacción previa con esa persona en este período encarnacional en particular, y aun así puedes tener esa misma sensación de familiaridad. Y es porque realmente interactúas con esos individuos. Y es porque, cuando estás en ese otro país y esos individuos interactúan contigo, no es por casualidad; está basado en tus elecciones y en tus creencias. Está basado en tu deseo de estar allí y en su deseo de interactuar contigo para tener la oportunidad de experimentar los sentimientos y emociones implicados en esa interacción.

Nunca es una coincidencia. Siempre es una elección. Incluso cuando pasas junto a ese individuo en la calle y tienes esa breve interacción, y sientes y percibes ese conocimiento, es porque ese supuesto encuentro casual en la calle no fue casual en absoluto. Fue por tu elección, por tus creencias, por tu deseo de crear toda esa realidad. Tú lo creas todo. Absolutamente cada instante de tu realidad. Tú lo creas todo. Cuando pasaste junto a ese individuo en la calle, fue un acuerdo pasar junto a esa persona.

Los acontecimientos más mínimos dentro de tus actividades cotidianas se basan en acuerdos y contratos. Es una obra muy, muy elaborada en la que estás involucrado, donde tú, como individuo, eliges las interacciones, y otros eligen y acuerdan interactuar contigo. La extensión de esa interacción se basa en las creencias que tú mantienes, en las creencias que el otro mantiene, y en el deseo de interactuar, de experimentar sentimientos similares, de experimentar las emociones, de experimentar, en efecto, las relaciones en las que puedes participar, de experimentar muchas veces el amor, e incluso experimentar el llamado odio que puedan sentir el uno por el otro, o la indiferencia que puedan sentir entre sí. Todo es un elaborado plan en el que has acordado participar, del cual has sido el productor total, con cada individuo teniendo las mismas oportunidades de participar o no hacerlo, tomando las mismas decisiones de participar o no participar, basadas en las creencias que mantienen. Todo es una ilusión.

Muchas veces existe dentro de nuestra interacción una alteración de la energía que nos permite transmitir a través de nuestro amigo, y nos permite trascender, si lo deseas, por los diversos niveles de energía para expresar, mediante sentimientos, emociones e ideas, los mensajes que te traemos. Cuando participamos en esa actividad, muchas veces tenemos un efecto sobre la energía que se encuentra dentro de tu rango, por así decirlo, de tu sistema de grabación. Ves, tú grabas mediante un tipo de fenómeno electromagnético, un aparato que es similar al tipo de energía electromagnética que tú has puesto en su lugar y que llamas tu velo, y nosotros intentamos manipular y trascender ese tipo de energía. Y cuando lo hacemos, podemos tener un efecto sobre varias energías que están en las cercanías, por así decirlo, de tu aparato de grabación.

Ahora bien, en las instancias particulares a las que te refieres, en realidad tuvimos un efecto sobre una energía dentro de esa área específica que permitió que tu aparato captara lo que tú llamas una onda de radio. No es tan difícil de comprender cuando entiendes que, dentro de tu propia realidad, estás creando diversas ondas de radio que se transmiten a través de diferentes tipos de aparatos, y que un aparato puede afectar y recibir información de otro tipo de aparato del cual no se pretendía recibir información. Por ejemplo, tus llamados teléfonos celulares muchas veces pueden ser captados por una radio, pueden recibirse en tus llamados radios de banda ciudadana. Cualquier otro tipo de ondas aéreas, ondas de radio u ondas de transmisión pueden tener esa interferencia y, de hecho, afectar la transmisión de ese teléfono celular, y de ese modo [pueden] estar recibiendo información que está siendo enviada desde ese teléfono celular.

De manera similar, estamos emitiendo un tipo de energía electromagnética que puede y de hecho influye en tu aparato receptor, en tu aparato de grabación. Y muchas veces, como sabrás, tu aparato de grabación no logra recibir ningún mensaje. Y eso no se debe necesariamente a que hayamos intentado alterar esa grabación, aunque a veces hemos sido culpables de ello (risas), sino más bien a que la energía que tú has creado y en la que nosotros participamos no es el mismo tipo de energía que, podríamos decir, sea propicia para permitirte tener una recepción muy precisa con tu sistema de grabación.

De manera similar, es posible que esa misma energía —que no solo nosotros creamos, sino que tú, como individuo, también participas y eres responsable de crear— permita que tu sistema de grabación capte otras llamadas ondas de radio que existen dentro del mismo espacio y del mismo tiempo. Y eso fue lo que ocurrió en la instancia a la que te refieres.

Una pregunta muy interesante. Cuando existías en lo que llamamos la vieja era y en la vieja energía, muchas veces los individuos elegían experimentar ciertas actividades durante todo su período encarnacional. En otras palabras, cuando estabas en tu período entre encarnaciones, establecías las principales actividades e instancias que experimentarías a lo largo de todo tu nivel vibracional. Y entrabas en un nivel encarnacional trayendo contigo esos sistemas de creencias que habías elegido mientras estabas en ese estado entre encarnaciones. Y en ese sentido, te habría resultado muy difícil alterar esa experiencia en particular, alterar esa realidad en particular durante ese período encarnacional específico.

Sin embargo, tú, como individuo y como conciencia humana, has elegido entrar en lo que hemos llamado la nueva era y la nueva energía. Has elegido tener la capacidad de traer a tu conciencia la comprensión de tu proceso de creación de la realidad y tener la capacidad de alterar tu realidad particular al modificar tus sistemas de creencias. Y no es que no pudieras haber hecho eso en la vieja era y en la vieja energía, en absoluto. No es algo que no hubieras podido hacer todo el tiempo, simplemente tú, como conciencia humana, acordaste no hacerlo. Es una ilusión, y acordaste entrar en un período encarnacional con todos los eventos particulares ya establecidos para poder experimentarlos, y acordaste no alterarlos.

Y así, era posible predecir el futuro de toda tu humanidad, si lo deseas. Pero has cambiado eso. Has alterado ese tipo particular de proceso de creación. Has acordado, como conciencia humana, tener la capacidad, mientras estás en tu período encarnacional, de alterar la dirección; de cambiar conscientemente la creencia; de no tener que, por así decirlo, morir y tomar diferentes decisiones y luego reencarnar para tener esas experiencias, sino más bien tener la capacidad de hacerlo conscientemente en este período encarnacional. Y eso es lo emocionante, y eso es lo que hace tan diferente a la nueva era y a la nueva energía de la vieja era y la vieja energía.

Ahora bien, existen muchos individuos dentro de este período de transición, y habrá muchos que existirán más allá de este período de transición, que eligen permanecer en la vieja era y la vieja energía, que eligen no creer que ellos lo crean todo. Y ves, para poder alterar la creencia primero debes creer que puedes alterarla. Para poder alterar la realidad primero debes creer que tienes la capacidad de alterar la realidad. Es muy fácil para nosotros decir que tú creas tu realidad, y es muy fácil para otros individuos venir y decir: “Bueno, sí, yo creé todo eso. Soy responsable de ello. Pero no tengo idea de cómo cambiarlo.”

Verás, cuando aceptas la responsabilidad y comprendes que tú lo creas todo, comienzas a tener vislumbres de cómo cambiarlo. Empiezas a recibir sugerencias intuitivas sobre cómo cambiarlo. Cuando expresas la intención de mantener la creencia de que eres el creador de tu realidad, cuando expresas la intención de mantener la creencia de que tienes la capacidad de alterar conscientemente tu realidad, entonces comienzas a recibir las sugerencias intuitivas que te permiten traer a tu conciencia los sistemas de creencias que posees y que son responsables de la realidad que estás experimentando.

Ahora bien, hemos sugerido antes y volvemos a sugerir que cuando tomas esa decisión, cuando haces esa elección dentro de este período encarnacional de mantener la creencia de que creas tu realidad, y cuando comienzas a tener vislumbres de ese proceso de creación de la realidad, no puedes volver atrás. No puedes retroceder y decir: “Bueno, ya no quiero hacer esto. Me gustaba más cuando podía culpar a mis vecinos. Me gustaba más cuando podía culpar a Dios.” No puedes volver atrás. Y cuando intentas hacerlo, experimentarás malestar y desasosiego, porque sabrás dentro de tu conciencia que tú lo creas todo, y tratarás de esconderte de ese efecto, y tendrás todo tipo de procesos de creación de realidad que validarán que, efectivamente, tú lo creas todo, porque esa es la creencia que has comenzado a sostener. Y cuando no aceptas la responsabilidad por ello, cuando deseas conscientemente retroceder, tienes dificultad.

No existe el bien ni el mal, excepto aquello que tú crees que es bien o mal. Si un individuo desea permanecer en la vieja era y en la vieja energía, no hay nada de malo en ello. Es una elección personal. Y si deseas entrar en la nueva era y en la nueva energía, tampoco hay nada de malo en eso. Y no hay una que sea mejor que la otra. Es una elección. Existís en una ilusión y puedes tener lo que desees, y no hay bien ni mal. Solo hay tres cosas que te sugeriríamos mantener como absolutas: Eres una Parte del Uno. Eres el dios que buscas. No puedes ser otra cosa más que el creador de tu realidad. Puede que no elijas mantener esa creencia conscientemente, pero aun así, es un absoluto. Tú creas tu realidad. Si no crees que creas tu realidad, entonces crearás la realidad que respalde esa creencia. Esa es tu elección, pero aun así, tú lo creas todo. Eres una Parte del Uno, creas tu realidad, y te garantizamos absolutamente que no puedes fallar en algún momento en regresar a la comprensión de quién y qué eres realmente. Más allá de esas tres simples creencias, absolutamente todo lo demás está abierto. Absolutamente todo es una ilusión.

Si deseas creer que tienes la capacidad de crear tu realidad, has acordado ahora, como conciencia humana, establecer un tipo de energía que te permite traer a tu conciencia esa comprensión del proceso de creación de la realidad, y si deseas alterarla, puedes alterarla.

Ahora bien, hay individuos que dirán: “Bueno, escucha, soy una persona baja y gorda, y nunca voy a poder jugar baloncesto.” Bueno, no estamos sugiriendo que puedas hacer ese tipo de alteraciones en tu ser físico. No es que no puedas, pero ves, has acordado, una vez más, entrar en esta realidad ilusoria trayendo contigo algunos llamados sistemas de creencias de la conciencia humana, y que es difícil alterar tu apariencia física. Es difícil alterar tu constitución física, y sin embargo, irónicamente, irónicamente hay individuos que están siendo reencarnados en tu nivel vibracional en este momento que están mostrando la capacidad de alterar su ADN y realmente modificar su constitución física. Incluso eso no está fuera de tu capacidad, salvo por el hecho de que crees que no lo está.

Y así, puedes crear lo que desees. A medida que entras en la nueva era y la nueva energía, sí, si deseas alterar lo que llamas esas creencias particulares que trajiste desde los estados entre encarnaciones, entonces puedes alterarlas, y sí, puedes crear lo que desees. Y tienes esa capacidad; tienes, como conciencia humana y como individuo, esa habilidad que tú, como individuo y como conciencia humana, habías acordado no tener en tu llamado pasado.

Y así, sí, para responder a tu pregunta de manera simple: si deseas alterar la realidad perpetua que pareces estar experimentando, puede hacerse. Es una cuestión de alterar creencias. Es una cuestión de traer a tu conciencia, ante todo, una comprensión de cuál es la creencia; traer a tu conciencia una comprensión del amor propio; traer a tu conciencia la comprensión y aceptación de la responsabilidad por la realidad que experimentas, no porque sea malo que estés creando esa realidad, sino para que puedas cambiarla. Para que puedas cambiarla. Si no entiendes y aceptas la responsabilidad, entonces no puedes cambiarla. Si no crees que la creaste, entonces perpetúas la realidad para demostrar que no la creaste, para sostener ese sistema de creencias de que no eres responsable, de que no es tu realidad. Se convierte en un concepto muy difícil de comprender para los individuos, y tú, una vez más, como individuo y como conciencia humana, has establecido un marco temporal para perpetuar tu creencia en una realidad ilusoria.

Para perpetuar esta creencia de que existe un tiempo lineal, has establecido un marco temporal para que ocurra esta transición hacia la nueva energía. Y aunque ya has superado ampliamente el punto medio, ciertamente aún no has completado esa transición hacia la nueva era y la nueva energía. Por lo tanto, facilitar aquello que deseas es más difícil en este tiempo en particular que lo que podría ser dentro de cinco o seis años a partir de ahora. Y eso, nuevamente, es una elección de la conciencia humana. Es tu elección perpetuar la ilusión.

Siempre damos la bienvenida a la oportunidad de unirnos. Ves, para que nosotros entremos en tu nivel vibracional e interactuemos contigo, depende de tus elecciones. Le hemos sugerido al canal que siempre estaremos disponibles.

Ahora bien, él se sorprendería un poco si le dijéramos que hay más duda en su mente que en la de cualquier otra persona sobre si realmente nos presentaremos. Y ahí radica el problema. No es necesariamente que no deseemos entrar en tu nivel vibracional. De hecho, damos la bienvenida a esa oportunidad.

Tal vez el más dudoso entre ustedes sea su canal, quien muchas veces tiene dificultad en creer que tiene la capacidad de apartarse completamente y permitirnos llevarlo en un pequeño viaje donde le mostramos destellos, donde lo atraemos a regresar porque le ofrecemos visiones de las partes internas de quién y qué es realmente, que muchas veces le provocan lágrimas mientras canaliza, y eso es porque está experimentando una vivencia completamente diferente de la que ustedes tienen. Y muchas veces tiene dificultad en apartar esa conciencia y permitirnos entrar.

Muchos individuos que conocen y entienden a nuestro canal saben que él es, si nada más, una persona de voluntad muy fuerte y terca, y convencerlo puede ser bastante difícil en ocasiones.

Bueno, una vez más, nos gustaría agradecerte. Y, como siempre, ha sido un placer. Damos la bienvenida a estas oportunidades de interactuar y compartir contigo, pues, en efecto, nosotros también aprendemos cuando venimos a interactuar, ya que ustedes son líderes por derecho propio en este proceso de creación. Ustedes están entre lo que podríamos llamar la vanguardia de la creación, y damos la bienvenida a las oportunidades de aprender y compartir con cada uno de ustedes. Y hasta la próxima vez que nos inviten a regresar, les deseamos un adiós, con amor y con paz.