Joshiah
3 de Noviembre de 2002
Bueno, entonces. Una vez más, es en verdad un honor para nosotros ser invitados a su realidad y a su nivel vibratorio. Y quisiéramos expresar nuestros saludos y nuestra gratitud a cada uno de ustedes por ofrecernos esta oportunidad de interactuar y de compartir con ustedes. Ahora, pediríamos nuevamente, como es nuestra costumbre, que expresen la intención, si lo desean, de permitir un mayor adelgazamiento del velo. Permitir que aquellas entidades que estarían con nosotros esta tarde tengan también la oportunidad de entrar en su nivel vibratorio y de tener esa oportunidad de interactuar y compartir con cada uno de ustedes. Como siempre, esa interacción es su elección. Esa expresión de adelgazar el velo es su elección. Simplemente pedimos, si lo eligen, permitir que eso ocurra. Ahora, también pediríamos de nuevo si nos concederían un momento de silencio y brevemente intentaríamos ajustar la energía dentro de este espacio sagrado y afinar nuestra conexión con nuestro amigo Elías (el canal).
Bueno, entonces, una vez más, les recordamos antes de comenzar con la información de esta tarde que, si eligen participar en lo que llamamos la comunicación silenciosa, ese intercambio telepático de información e interacción con otras entidades que están con nosotros en esta tarde, basta con que expresen la intención y, como siempre, verán que si eligen cerrar sus ojos descubrirán que es bastante fácil para ustedes desplazar su conciencia dentro de este espacio sagrado y dentro de esta energía que han creado en esta tarde. Y al desplazar su conciencia y al expresar esa intención de involucrarse en esa comunicación silenciosa, descubrirán que ese intercambio telepático de información ciertamente ocurre y que, como siempre, muchas veces es mucho más pertinente y mucho más exacto para sus necesidades individuales, si lo desean, o para sus deseos y peticiones individuales, que la información que expresamos a través de este uso bastante limitado del vocabulario y a través de nuestro amigo Elías. Y por lo tanto, deberíamos animarlos, una vez más, si lo eligen, a permitir esa comunicación silenciosa, a permitir que ocurra ese intercambio telepático de información. Y, como siempre, muchas veces descubrirán que les resulta mucho más beneficioso que la información que nosotros expresamos.
Ahora, ustedes crean su realidad. Les hemos dicho eso tantas veces que casi se vuelve redundante seguir expresando ese mensaje. Y, sin embargo, dentro de ello se encuentran tantas llaves para tantas de las situaciones aparentemente difíciles que experimentan dentro de esta realidad, dentro de esta realidad de conciencia que ustedes crean y en la que existen. Muchas de las experiencias difíciles —las importantes, las que no pueden cambiar— son realidades que crean tan segura y tan fácilmente como crean aquellas sobre las que parecen tener control y que sí pueden cambiar. Absolutamente.
Ahora bien, son precisamente aquellas situaciones que parecen causarles mayores dificultades en su existencia dentro de su estado de conciencia las que también resultan más difíciles de alterar. Se involucran en situaciones que influyen en sus relaciones, se involucran en influencias y en situaciones que afectan su capacidad de crear y experimentar abundancia, y experimentan dificultades en áreas relacionadas con la salud. Y esas áreas, por nombrar solo algunas, son las que, una vez más, encuentran muy difíciles de cambiar. Esas son las realidades que experimentan. Son los problemas reales dentro de su conciencia y dentro de su existencia. Son los que aparentemente están más allá de su control y, por lo tanto, son los que para la mayoría de las entidades que existen dentro de este período particular de encarnación y dentro de su estado de conciencia en su nivel vibratorio resultan más difíciles de afrontar. Y, sin embargo, ustedes lo crean todo. Es toda su creación y, con toda certeza, pueden cambiarla. Absolutamente.
Existen en su estado consciente dentro de un período en su marco de tiempo lineal donde creen que hay, por ejemplo, muchos problemas que están fuera de su control en cuanto a su salud. Creen, por ejemplo, que existen enfermedades que son incurables. Y ustedes, como individuos, todos han experimentado o han estado relacionados con personas que han padecido esas enfermedades aparentemente incurables y, en ese momento, ciertamente creen que no tienen control. Creen que está más allá de su capacidad alterar ese tipo de realidad. Después de todo, es incurable. Quiero decir, si es incurable y está demostrado que es incurable, entonces, absolutamente, deben estar a merced de algún tipo de realidad que está fuera de su control. Porque es incurable y tienen todo tipo de pruebas científicas que respaldan esa teoría de que esa aflicción particular no puede ser curada. Que no hay absolutamente ninguna solución para el problema.Y, sin embargo, incluso en esos casos, ustedes, como individuos, pueden dar ejemplos de esas enfermedades aparentemente incurables que de alguna manera desaparecen en la persona que ha estado afligida con ese tipo particular de enfermedad incurable. Todos pueden dar ejemplos de individuos que se suponía iban a morir y no lo hicieron.
Ahora, dentro de su período encarnacional, dentro de su conciencia, ustedes observan esos casos en los que esas personas aparentemente vencieron las probabilidades, individuos que superaron esas enfermedades aparentemente incurables, y lo llaman un milagro. Muchas veces lo llaman, en efecto, un acto de Dios.
Bueno, es un acto de Dios. No están equivocados en eso. Pero es un acto de Dios que existe dentro de cada uno de ustedes, no una entidad que existe fuera de quiénes y qué son ustedes. Y lo llaman un milagro porque fue algo que sucedió de manera inesperada. Fue algo que ocurrió y que no se podía explicar. Es algo que ocurrió y que no pueden duplicar a voluntad. Y, más importante aún, es algo que ocurrió y que no pueden probar científicamente, y por lo tanto lo llaman un milagro.
Ven, dentro de este período encarnacional en particular y dentro de su conciencia, si no pueden probarlo científicamente, especialmente si no pueden probarlo científicamente dentro de esta sociedad en la que existen, entonces debe ser un milagro. Si no pueden duplicarlo a voluntad, entonces ciertamente no es algo científicamente comprobable y, por lo tanto, debe ser un milagro.
Bueno, el problema con ese tipo de explicación es que los milagros continúan sucediendo y seguirán ocurriendo. Y si ese es el caso, si es posible que exista un milagro que encaje dentro de esas explicaciones, entonces debería ser posible duplicar el milagro. El hecho de que no pueda ser probado científicamente no lo hace irreal. El hecho de que no puedan probarlo científicamente no significa que no pueda volver a ocurrir. Absolutamente no.
Ven, cuando crean su realidad a través de sus sistemas de creencias y a través de sus elecciones y a través de sus decisiones, cuando la crean usando su imaginación y su deseo y sus expectativas, están creando su realidad de una manera que no puede ser probada científicamente, y sin embargo lo hacen. Lo hacen de manera continua. Es el método que se utiliza para crear toda su realidad, y aun así no pueden probarlo. Entonces debería seguirse lógicamente que toda su creación es un milagro porque no puede ser probada científicamente.
Uno de los obstáculos, si lo desean, para entrar en esta nueva era y en la nueva energía es la falta de llevar su espiritualidad a su conciencia. La falta de dejar de lado esa creencia de que: “Si no podemos probarlo, debe ser un milagro, no es real.” Ustedes crean su realidad enteramente desde una posición que no puede ser probada científicamente. Absolutamente.
También tienen otros tipos de enfermedades dentro de su realidad que experimentan en su estado consciente. Otros tipos de enfermedades que están basadas en la llamada filosofía o explicación hereditaria. Que están en sus genes. Que es una enfermedad particular que se transfiere de una generación a otra. Que, una vez más, es incurable. De hecho, algunas de sus enfermedades aparentemente más horrendas son enfermedades hereditarias; que se transmiten a través de su ADN, que pueden ser rastreadas a través de sus genes.
También existe, dentro de su período encarnacional particular en este marco de tiempo lineal, la creencia de que si se detuviera la progresión de esa enfermedad haciendo que aquellos individuos que portan ese gen defectuoso detuvieran su proceso reproductivo, podrían eliminar esa enfermedad de su existencia. Y esa es una creencia comúnmente sostenida e incluso se está intentando aplicar en ciertas áreas y respecto a ciertas enfermedades llamadas hereditarias. Bueno, eso es una simplificación bastante grande.
No estamos sugiriendo que no puedan eliminar esa enfermedad. Si lo creen, si lo mantienen como un deseo y como una creencia y toman esas decisiones, absolutamente pueden eliminar esa enfermedad. Irónicamente, ni siquiera tienen que llegar tan lejos si no quieren. Pero los otros métodos no están científicamente probados. Al menos este método en particular sí pueden respaldarlo científicamente y, por lo tanto, como lo creen, pueden eliminarlo. El problema con esa línea de razonamiento en particular es que en algún punto dentro de su llamada historia, que existe en el ahora, ustedes crearon esa enfermedad.
Verán, si se trata de una deficiencia genética, ¿piensan que los primeros seres humanos —si siguen esa línea de razonamiento—, que debió existir un primer humano que llevara dentro de sí ese gen defectuoso? Y si es así, entonces debería existir a lo largo de toda su realidad, a lo largo de todo su nivel vibracional. Y si ese individuo original no portaba ese gen defectuoso, entonces debió haberse desarrollado en algún momento del camino. Y si se desarrolló en algún momento, ¿qué les hace pensar que, incluso si lo eliminan de su existencia, no pueda aparecer algún otro gen defectuoso que se desarrolle, que de repente surja en su realidad y de pronto estén de nuevo en el mismo punto de partida? Volverían a tener esa enfermedad genética que puede heredarse de unos a otros. Puede ser un tipo de [afección] completamente diferente, pero aun así puede ser igualmente devastadora como la primera.
Verán, pueden eliminar la primera y probarlo científicamente, una vez más, deteniendo la procreación de los individuos responsables de portar ese gen defectuoso. Y así esa enfermedad desaparecerá porque creen que desaparecerá. Creen, dentro de su conciencia humana, que es posible hacer que desaparezca y, por lo tanto, puede hacerlo mediante ese método, si eso es lo que desean. Pero tienen individuos que existen dentro de su nivel vibracional que creen, que desean tener algún tipo de enfermedad para respaldar su creencia de que, en efecto, existen problemas de salud que están más allá de su control. Y entonces, al curar una enfermedad, crearán otra para sostener ese deseo en particular, para sostener esa creencia.
También tienen, dentro de su estado de conciencia, enfermedades que no son del tipo genético, sino más bien enfermedades que se transmiten de un individuo a otro. Y ustedes, una vez más dentro de su comunidad científica, dedican enormes esfuerzos para encontrar curas para esas enfermedades. Y lo hacen. Y lo hacen. Y pueden mirar en su llamada historia y encontrar todo tipo de ejemplos en los que han tenido mucho éxito en ese esfuerzo en particular. Incluso pueden encontrar pruebas científicas de que es posible eliminar, erradicar, diversas enfermedades de su nivel vibracional. Y si no erradicarlas, al menos controlarlas y al menos desarrollar sus llamadas vacunas que pueden controlar y darles cierto control sobre esas enfermedades. Darles cierta inmunidad a esas enfermedades.
Y resulta bastante irónico que, si estudiaran esa misma historia, encontrarían en muchos casos que, al erradicar una enfermedad, de repente parece surgir de la nada una nueva enfermedad para ocupar su lugar. Y muchas veces la nueva enfermedad es mucho más difícil de erradicar o mucho más difícil de encontrar inmunización en su contra que lo que fue la enfermedad original.
Ahora bien, su comunidad científica nunca se detendría a preguntar por qué. La comunidad científica, que está separada de su espiritualidad, no aceptaría el hecho de que las razones por las que existen esas enfermedades son los sistemas de creencias dentro de su conciencia humana. Y a medida que continúan manteniendo esos sistemas de creencias y a medida que continúan creyendo que, en efecto, hay aflicciones que están más allá de su capacidad de controlar, cuando siguen creyendo que existen individuos fuera de su nivel vibracional que de alguna manera pueden tener un efecto negativo sobre su existencia en su estado de conciencia, entonces continúan creando las realidades que apoyan esa creencia. Y para aquellos individuos que creen que no es posible tener control sobre sus problemas de salud, entonces crearán la realidad que apoye esa creencia. Absolutamente. Y no importa cuántos avances científicos se hagan en esa área, mientras mantengan la creencia dentro de su estado de conciencia humana, no resolverán los problemas. Siguen creando las realidades que sostienen los sistemas de creencias.
Ahora bien, al entrar en esta nueva era y en esta nueva energía, se está volviendo mucho más fácil salirse de ese sistema de creencias de la conciencia humana. Se está volviendo mucho más fácil para ustedes comprender que las realidades que están experimentando son resultado de las creencias que sostienen. Se está volviendo mucho más fácil para ustedes captar cuál es esa creencia o cuáles son esos sistemas de creencias para que puedan llevarlos a su conciencia y puedan cambiarlos. Y cuando los cambien, absolutamente cambiarán su realidad.
Y tendrán la oportunidad de experimentar los llamados milagros. Los sucesos inexplicables. Los acontecimientos inesperados desde un punto de vista científico. Y los eventos que, absolutamente, no están comprobados científicamente. Y las actividades particulares o los sucesos concretos dentro de su realidad que otros encuentran difícil de duplicar. Y ustedes experimentarán los milagros. Tienen esa capacidad. Está dentro de cada uno de ustedes. No es algo que exista solo para este o para aquel. Absolutamente no.
Todos ustedes son iguales. Son piezas iguales del Uno, si así lo desean. Son todas chispas iguales de conciencia que tienen la capacidad de crear su realidad. Solo tienen que creer.
Mientras exista dentro de la conciencia humana la creencia de que hay enfermedades incurables, seguirán experimentando enfermedades incurables. Mientras existan creencias dentro de la conciencia humana de que hay enfermedades hereditarias, seguirán experimentando esos tipos particulares de enfermedades. Incluso si desarrollan métodos para eliminar las ya existentes, mientras crean que existe la posibilidad de que esa enfermedad exista, entonces crearán la enfermedad para sostener el sistema de creencias. Absolutamente. Y mientras crean que tienen dentro de ustedes la capacidad de crear completamente su realidad, entonces tendrán la habilidad de eliminar esas enfermedades particulares de su existencia. De experimentar los milagros. De tener lo inesperado y lo inexplicable suceder.
Solo tienen que creer. Solo tienen que entender que es una ilusión. Solo es real porque ustedes creen que es real. Y, una vez más, es porque creen que es tan real que está más allá de su control, que tienen dificultad. No es difícil crear las cosas pequeñas y simples. No es difícil crear el espacio de estacionamiento, no es difícil crear la luz verde, si eso es lo que desean tener. Esas son las cosas pequeñas, las cosas simples, y ustedes creen que no es difícil hacerlo. Irónicamente, no es más difícil crear cualquier otra realidad que crear el espacio de estacionamiento. Solo creen que lo demás es mucho más real. Y porque es real, entonces no pueden controlar eso.
Porque la enfermedad es real —se puede probar, se puede poner bajo un telescopio o un microscopio y se puede ver, se puede probar que es real. “Mira, existe. Está justo ahí.” Se puede usar todo tipo de equipo electrónico para probar que existe. Y, por lo tanto, es real. Y cuando es real, entonces es mucho más fácil— o mejor dicho, mucho más difícil— para ustedes alterarla porque es real. Y es cuando comienzan a entender que no es real, que es una ilusión, que solo es real porque creen que es real, que es su creación, cuando comienzan a entender que es una ilusión, entonces pueden cambiarla.
Y pueden cambiarla con bastante facilidad—tan fácilmente como crean el espacio de estacionamiento. Ustedes crean su realidad y lo hacen a través de sus sistemas de creencias. Comprender cuáles son sus sistemas de creencias, sin importar en qué área de su existencia estén enfocados, les permitirá alterar ese sistema de creencias y, por lo tanto, alterar su realidad. Llevar a su conciencia esa comprensión de que crean su realidad y que desean tener comprensión consciente de cuáles son sus creencias les ayudará a crear conscientemente su realidad, a alterar conscientemente la realidad que encuentran menos deseable, o a sostener el deseo por la realidad que desean tener. Es su elección. Es su realidad. Es su ilusión y ustedes la crean toda. Absolutamente. Incluso las enfermedades incurables, las enfermedades genéticas, son su creación. Y si lo desean y si lo creen, pueden cambiar eso. Absolutamente.
Ahora, nos gustaría hacer algo un poco diferente con ustedes esta tarde, algo que no hemos hecho desde hace bastante tiempo. Y nos gustaría pedirles a cada uno de ustedes, si así lo eligen, que participen en una forma muy suave de meditación. Y les pediríamos a cada uno que, si así lo desean, se pongan muy cómodos y cierren sus ojos, permitiéndose relajarse. Cierren los ojos y respiren profundamente, y permítanse relajarse. Relájense y sientan la presencia y el amor de la energía que los rodea. Y permitan que su conciencia se aparte, que se relaje. Relájense.
Ahora les pediríamos que usen su imaginación. Usen su imaginación—la clave de su creación. E imaginen, si quieren, una fuente de energía que existe sobre su ser, que existe justo encima de su cabeza. Y pueden imaginar esa energía en la forma que deseen. Imagínenla en la forma de una luz, si eso es lo que desean. O imagínenla en la forma de una ola, si eso es lo que desean. Simplemente permitan que su imaginación visualice esa energía existiendo sobre su ser.
Y ahora, lentamente trae esa energía hacia abajo e introdúcela por la parte superior de tu cabeza, justo en la cima de tu ser. Y permite que descienda hasta el área que ustedes llaman su sexto chakra, el área que llaman su tercer ojo. Y siente cómo la energía se asienta allí. Siente cómo energiza y vitaliza esa parte de tu ser. Imagina esa energía expandiendo esa zona particular de tu cerebro. Imagina esa parte intuitiva expandiéndose, agrandándose, empujando hacia afuera, abriendo ese tercer ojo. Abriendo esa intuición. Permitendo que esa intuición crezca. Permitiendo que esa capacidad de recibir los mensajes intuitivos se expanda. Siente esa presión expandiéndose suavemente.
Ahora, permite que la energía descienda más a través de tu cabeza, que siga bajando y rodee esa pequeña glándula que existe en el centro mismo de tu cabeza. La glándula pituitaria, que tiene tal efecto sobre todo el cuerpo físico. Esa glándula que tiene la capacidad de emitir pequeñísimas sustancias químicas que activan a otras glándulas en todo tu ser físico para que funcionen adecuadamente. Siente la energía envolver el centro de tu cráneo y rodear esa glándula pituitaria. Siente el equilibrio de la energía. Y suavemente, muy suavemente, entrar y manipular esa glándula pituitaria. Siente cómo esa energía controla las terminaciones nerviosas particulares que están todas centradas en la glándula pituitaria y que activan las respuestas provenientes de las sugerencias mentales, de tus pensamientos, de tus emociones, que hacen que la glándula pituitaria libere las sustancias químicas que controlan gran parte de tu ser físico. Siente esa energía equilibrar las respuestas eléctricas de tu cerebro hacia la pituitaria, equilibrando suavemente.
Ahora siente cómo la energía desciende más. Permite que esa energía siga bajando. Siente cómo entra en tus mandíbulas y en la parte posterior de tu cuello. Siente cómo se derrama sobre tus hombros y entra en tu torso y baja por tus brazos. Presta atención cuando llegue a un punto al que atrae tu imaginación. Presta atención cuando alcance un lugar donde despierte una respuesta y permite que tus pensamientos viajen hacia ese lugar. Permite que tu concentración se centre en ese punto donde la energía provoca una respuesta y deja que la energía manipule y equilibre, y ayude a transformar ese lugar, a equilibrarlo, y a eliminar cualquier tipo de dificultad que puedas estar experimentando en tu ser físico en ese sitio.
Siente cómo la energía viaja por tu torso, baja por tus piernas y hasta tus pies. Y a medida que recorre todo tu ser físico, una vez más presta atención a los lugares donde se detiene y permite que esa energía te asista.
Esa energía es tu energía. Esa energía es la esencia de quién y qué eres en verdad. Esa energía tiene la capacidad de eliminar de tu existencia cualquier enfermedad que puedas experimentar, ya sea una enfermedad que denominarías incurable, una enfermedad transmisible, o una enfermedad hereditaria, no importa. Dentro de ti está la energía que hace posible que experimentes los llamados milagros, la eliminación de cualquier tipo de aflicción que hayas permitido entrar en tu ser físico. Solo necesitas creer.
Ahora, lentamente te pediremos que regreses a tu conciencia, que suavemente, muy suavemente, permitas que tu conciencia retorne, que vuelvas, una vez más, al estado en el que puedas escuchar conscientemente nuestras voces. Que te permitas, nuevamente, estar despierto si eso es lo que deseas.
Ahora, haremos una pausa por un momento o dos, y si tienen alguna pregunta para nosotros, estaremos dispuestos a regresar e intentar responderlas. Y mientras tanto, queremos recordarles que no dejamos este espacio sagrado, y en verdad no estamos separados de ustedes por tiempo o espacio, sino más bien por un nivel de vibración. Y si desean que estemos con ustedes, basta con que expresen la intención y siempre estaremos con ustedes. Y siempre estamos agradecidos por la oportunidad de interactuar con ustedes, de compartir con ustedes, de ofrecerles nuestro apoyo infinito y nuestro amor incondicional. Y ahora los dejamos por un momento o dos, con amor y con paz.