Ley de la confusión

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Este es un término equivalente a la Ley del Libre Albedrío y a la Primera Distorsión, pero mientras que Ra usa “Ley del Libre Albedrío” solo unas pocas veces sin que el Interrogador lo solicite, emplean “Ley de la Confusión” más de 20 veces en referencia a esa distorsión más primordial. Ra indica que nosotros, los humanos de tercera densidad, llamamos a esta ley la “Ley del Libre Albedrío”. En su comprensión, es la “Ley de la Confusión”.

Ra: Hay una ley que creemos ser una de las distorsiones primordiales más significativas de la Ley del Uno. Esa es la Ley de la Confusión. Ustedes la han llamado la Ley del Libre Albedrío.

Ellos dicen que esta Ley es absolutamente primordial en el funcionamiento de la creación infinita, ya que toda experiencia surge de ella. Y transmiten de manera creativa solo algunas de las infinitas formas en que las entidades pueden honrar o no honrar esta Ley primordial, especialmente aquellos seres de densidades superiores en su interacción con la tercera densidad (como, por ejemplo, durante el contacto de Ra). Estas incluyen:

• Romper la Ley de la Confusión
• Infringir la Ley de la Confusión
• No se puede responder a una pregunta o dar información debido a la Ley de la Confusión
• Una consulta se encuentra más allá de la Ley de la Confusión
• Dar información sería una intromisión en la Ley de la Confusión
• Ciertas acciones están limitadas por la Ley de la Confusión
• Existen consideraciones complejas de la Ley de la Confusión
• Estar cerca del límite de, responder dentro de los límites de, o caminar cerca de la Ley de la Confusión
• Y casos en los que Ra debe simplemente invocar la Ley de la Confusión como explicación de por qué no pueden responder

La Ley de la Confusión opera independientemente de que uno esté de acuerdo con ella o no, pero el progreso en cada densidad sucesiva ocurre mediante una comprensión y armonía cada vez más profundas con esta ley.

Existe la posibilidad de que Ra haya usado “Ley de la Confusión” estrictamente en términos de la operación de la Ley del Libre Albedrío en las condiciones veladas e intencionalmente confusas de esta densidad.

Interrogador: Bien. Entonces supongo que la primera distorsión es, digamos, el motivador o lo que permite este bloqueo. ¿Es correcto?

Ra: Yo soy Ra. No deseamos discutir por detalles, pero preferimos evitar el uso de términos como el verbo “permitir”. El libre albedrío no permite, ni la predeterminación impediría, las distorsiones experienciales. Más bien, la Ley de la Confusión ofrece un alcance libre para las energías de cada complejo mente/cuerpo/espíritu. El verbo “permitir” sería considerado peyorativo en el sentido de que sugiere una polaridad entre correcto e incorrecto o permitido y no permitido. Esto puede parecer un punto minúsculo. Sin embargo, en nuestra mejor manera de pensar, tiene cierto peso.

Nota del Autor: Voluntad de Confusiones

Solo podemos especular por qué Ra usa “Ley de la Confusión” en lugar de “Ley del Libre Albedrío” cuando ambos términos se refieren a lo mismo: la Primera Distorsión. Puede ser que Ra utilice el término “confusión” porque la entidad que ejerce esta ley primordial, en cualquier densidad pero especialmente en las condiciones veladas de la tercera densidad, está explorando una identidad ilusoria y separada —aquello que no es. Esto podría verse como una especie de confusión, casi como si el Creador se hubiera confundido a Sí mismo y hubiera creado un entorno de confusión en el que el viaje y las elecciones mismas son actos de un tipo de confusión.

Esto se ve amplificado por el velo (que extendió la primera distorsión del libre albedrío a la mente/cuerpo/espíritu). Dentro de las condiciones posteriores al velo apareció una cortina semipermeable de misterio entre la mente consciente y la inconsciente, que sitúa al ser en un entorno donde todo está oculto: intenciones, información, esencia, los propios recursos, etc.

Ra: El velo primordial fue de tal importancia que puede considerarse análogo al manto de la tierra sobre todas las joyas dentro de la corteza terrestre: mientras que antes todos los aspectos del Creador eran conocidos conscientemente, después del velo casi ningún aspecto del Creador era conocido por la mente. Casi todo quedó enterrado bajo el velo.

Esto requiere que el buscador despierte nuevamente a la verdad de la unidad. Y en ese viaje, conduce a infinitas variedades de confusiones y malinterpretaciones del camino, de su propósito y, de hecho, de si siquiera existe un camino. Es abrumador. Como indica Ra en el siguiente extracto, nosotros en tercera densidad estamos inundados en un océano de experiencia intensivamente catalítica, siendo las demás densidades un 1% de intensivas:

Ra: El complejo mente/cuerpo/espíritu de la tercera densidad tiene quizás cien veces un programa de acción catalítica más intensivo del cual destilar distorsiones y aprendizajes/enseñanzas que cualquier otra de las densidades. Así, los aprendizajes/enseñanzas resultan sumamente confusos para el complejo mente/cuerpo/espíritu que está, digamos, inundado por el océano de la experiencia.

Quizás incluso el alcance del Libre Albedrío no sea precisamente tan “libre”, porque cada generación de la creación opera dentro de los parámetros de su progenitor: los sub-Logos dentro de los límites del Logos, los sub-sub-Logos dentro de los límites de nuestro sub-Logos, y así sucesivamente.

O tal vez se le considere una Ley de la Confusión porque, si a pesar de todas las apariencias posibles solo existe siempre la infinitud y la unidad, ¿quién es entonces el verdadero actor? ¿Quién está tomando las decisiones? ¿Nos confundimos al suponer que los individuos ilusorios tienen una voluntad separada?

Tomen todo lo anterior con una pizca extra de escepticismo, ya que la Ley de la Confusión estaba en acción en esta escritura.